[Mi hermano y yo teníamos alrededor de 5 años cuando nos dijeron la verdad de la milanesa]
Sabiamente mi madre nos dijo, "pregúntenle ustedes mismos a su tía".
X, una mujer maravillosa, hábil con sus manos, artista por excelencia, alta, delgada, para mi percepción de niña heterosexualizada y esteriotipada "un mujerón". Que cosía vestidos de noche de ensueño, organizaba grandes eventos, ayudaba a mi madre a ser emprendedora con sus manos, que gustaba de la belleza, desde la perspectiva de la moda. Vivía sola, tenía una jatazo, ayudaba a su familia, había viajado por el mundo y coleccionaba artículos de los más extraños, que yo adoraba observar.
Entonces un día le preguntamos a nuestra tía. Ella nos sentó en su regazo y nos contó que efectivamente nació teniendo pene y su familia la llamó Y, ella nunca se sintió contenta con ello, entonces a los 18, aproximadamente, viajó al extranjero, conoció gente que le hizo entender que si ella quería podía adecuar su cuerpo a lo que ella sentía, y así lo hizo. Regresando a nuestro pueblito con vagina nueva pero como la misma mujer que se fue.
Entonces se paró y nos dijo, "esto que ven aquí es el cuerpo de una mujer". He de decir que siempre tuvo unas tetas impresionantes y un buen culo. Ya la habíamos visto desnuda alguna vez y nos pareció ver una vagina, o al menos no vimos ningún pene. Agregó que lo importante para ella era que la queramos por lo que es, una buena persona con nosotrxs. Luego, nos explicó que ella era conocida como transexual, por ser alguien que nació con pene pero que se sentía mujer y que deseó siempre adecuar su cuerpo a ese sentir.
Son más de 20 años que ese concepto a rondado por mi cabeza con la mayor de las naturalidades, algunxs dirían normalidades, pero así fue, fluyó. Y con el tiempo conocí a personas que se sentían mujeres y tenían penes pero no querían tener vagina y hombres que tienen vagina y tetas y no quieren tener pene. Huy, ahí se complejizó la cosa, y se puso más chévere. Pero eso para otro día.
A los 5 años aprendí que debía querer a mi tía por lo que ella era, una persona. Qué idea de verdad tan pura, tan valiosa. Marca en la vida, y de tal manera que después debes aprender a aplicarla con otras personas, en otros matices... y ahí la vida se pone variopinta y te exige esfuerzo y voluntad.
No obstante, este episodio me llevó a otra idea que después de unos 7 años me hizo entrar en conflicto. Acababa de aprender que ser mujer, y sentirse mujer es tener un buen par de tetas, un buen culo y por excelencia una vagina. Y que pasa con mi cuerpo y mi sentirme mujer si no cumplo con ese prototipo?
...eso, también es para otro día.